siguen los decálogos

Chile

Llegaron a la esquina de Asunción y Montevideo a finales del 73. Los dos chicos jugaban a la pelota con mi hermano en la calle Castillo, aún sin asfaltar. Hablaban muy rapidito, parecía que aspiraban algunas palabras. Les entendimos que pronto seguirían viaje. Una mañana del 76 encontramos un cajón con libros en la vereda. Así pasaron por mi vida los primeros chilenos que conocí, como una exhalación en la diáspora latinoamericana.

El disco era un long play, la tapa mostraba a una mujer de cabellos lacios que miraba a su guitarra, iba envuelta en un poncho con colores de la tierra, tal vez bordado por ella misma. Su voz chiquita te envolvía, te encendía el alma. Según el favor del viento…despierte el hombre despierte.. decía Violeta y como una premonición: llorando estoy… me voy me voy.

Chile es en sí mismo una gran mina, una gran mina de poetas, pintores, músicos… artistas. Por algo el imperio fue siempre sanguinario para imponer el silencio en ese país tan largo. Pero, ¿será la raíz mapuche? ¿serán los sueños que cruzaron los mares? Porque las voces se han seguido alzando… renaciendo en las grietas, en los derrumbes, en los exilios.

Ya no sé si vi una foto o me la imaginé: pero veo casas en una ladera, casas de colores, frente al viento helado del Océano Pacífico. Y hay medias colgadas al sol en los balcones. ¿Será un recuerdo de alguno de los poetas chilenos que leí?

Gabriela, Nicanor, Roberto, Vicente, Pablo, la Viola. Una urdimbre de voces, de distintos tiempos, de distintos puertos.

Cruzar la cordillera en un mediodía diáfano. Llegar al Aeropuerto de Santiago, unos minutos para el trasbordo a un viaje más largo. Un café y un temblor que hace tintinear las copas del bar. Tierra terremota la tierra chilena.

Banalidades al otro lado de las montañas. Vip. Modelo chilena en decadencia encuentra  a presidente argentino decadente. Vip. Entrenador argentino de loca fama encuentra a conspicua presidenta chilena. Vip

Quiero conocer el sur –chileno argentino- Conocer el piano de Bahía Desolación, las tempestades humanas del Náufrago de las Estrellas, las canoeras de Fuegia. Esos peñascos hoscos, y el mar hondo y furioso, donde no valen otros límites que los de la desesperación y la sobrevivencia.

Quiero conocer los salares del norte, quiero que el viento me traiga la cantata cuando pise las calles de Santa María de Iquique. Escucharé entonces las voces de todos los compañeros

Desde el fondo del socavón llega un eco infinito ¡Viva Chile, mierda!

Graciela Vanzan

Decálogo:

1) El grafiti, los murales, el break dance, el hip-hop en rebeldía.

 2) Mi primer amigo, el chileno “Pablito”.

3) Isabel Allende, una mujer que parece joven, para todo lo que ha escrito.

4) La paradoja, Chile se quedo con el mar, y ahora él se lo devora.

5) La dictadura, el “666”. Pinocho un niño de verdad y Pinochet “un asesino de verdad”.

6) Bielsa, un argentino que es querido en Chile. ¿Otra paradoja?

7) La guerra, Inglaterra, Argentina, Chile: un pie en el pasado, otra en el presente, heridas que sangran. ¿Hasta cuándo sangran?

8) Un lugar donde todos conocen el mar. ¿A dónde viajan los docentes y sus alumnos?

9) Casas de madera, un terremoto, varios volcanes en erupción, mineros atrapados, muchas desgracias, etc.

10) Los chilenos son: hermanos, compañeros de clase, combativos, entregadores, hijos de puta, latinoamericanos, pro-yanquis, mal hablados, “a mí nunca me trataron mal”, son todos iguales, “el que no salta es de…

(Depende como se mire).

Juan Manuel Canosa

1 - Lautaro, mapuche rebelde

2 - Guerra del guano o del Pacífico (a través de Inglaterra dejan sin mar a Bolivia)

3 - Chiloé (último enclave realista, último escondite)

4 - Universidad privada / estudiantes combativos

5 - Violeta Parra (siempre por sobre todas)

6 - Diez mil kilómetros de frontera, la más larga de América

7 - Valparaíso, patrimonio munidial de ascensores

8 - Atacama, desierto, planeta seco

9 - País inexplicable

10 - ...que bandera mas rara ¿tendrá algo que ver con la de Texas?

Pablo Mini


Otro más

De lo que sé.

Un aeropuerto, con toda esa locura para los que van y vienen y tranquilidad de los que estan ahi .

El café tiene el mismo gusto que aca

Los negocios del aeropuerto,son igual que los de aca, los aeropuertos estan todos cortados con la misma tijera ??... o hechos con la misma cuchara de albañil caberia mejor , quiza haya un gran jose aeropuerto que es el que determina como sera cual o tal … , pero todos tienen su impronta .

Miedo, recuerdo cuando niño , los trenes con tropas que pasaban por mi pueblo hacia el sur , por que era una inminente guerra con ese país.

Como desarmar una bala de fusil, esos mismos soldados que pasaban ,una ves me regalaron una bala , la cual desarmaron delante un niño tan perplejo como asustado, y contento con ese tesoro que habia conseguido , recuerdo de una época oscura.

Un buen actor , patricio Contreras , el de la serie buscavidas … que linda , vista en blanco y negro …

Lo que no sé

Serán malos ?, como dicen algunos acerca de las actitudes que tienen .

Serán ordenados ?, como dice la gente que ha estado visitando ese pais .

El sabor de la centolla .

El vino blanco, nunca probe un vino blanco chileno . Y el mapa de chile siempre esta en color clarito será por que el vino blanco les sale rico ??

Marcelo Escande

Siguen los decálogos hasta el final

1.     1.      Chile me suena a una isla que parte, se desprende y se aleja. Una isla que es un pedacito de tierra flotando, que avanza como un tren de arena y minerales a todo vapor por los rieles del pacífico buscando algún helecho, un pasajero, alguna raíz caída, un océano que la envuelva con sus brazos de agua, la descubra isla-islote-cayo-humedad abajo-hundimiento que se alza-arriba up-up-up ruedas del tren girando-algo humeando en las chimeneas-algo tramándose en la profunda liviandad del aire.

2.       Zancudos o Mosquitos planeando el almuerzo del domingo poniendo un mantel de piel arcaica, molida o mestiza, rasguñada y herida. Los chupasangres del mundo asisten en familia a la gran comilona. Y terminan echando a algunos vampiros que siempre quieren colarse.

3.       Un nombre: Valentina. Su vida en Santiago. La historia de sus abuelos que llegaron en barcos moribundos, con hambre y deseos. Su ancianísima abuelita pertenece a un mundo anterior a nuestro mundo. Escuchamos en una grabadora su voz narrando sus días. No se entiende demasiado lo que dice pero la voz ronca, quebradiza, atravesada por los siglos, un timbre y un acento pariendo las guerras, nos lleva a un lugar apenas imaginado.

4.       La casa de los abuelos de mi amiga en este preciso instante está siendo demolida. Si hablamos bajito podemos escuchar el ruido de la máquina. La sed de la topadora. Algo se nos derrumba en las manos. Manos que no alcanzan para sostener tanta ruina. Luego van a construir otro edificio suponemos. Ella se lamenta en la distancia porque en esa casa amplia, de luz amarilla y de olor a guiso y a delantal y a cocina añeja, ella corría por los pasillos con sus primos y jugaban a viajar por el mundo, a ser grandes y a correr por otros caminos. Cuando algo se cae, una casa se cae, una niña se cae es como si algo adentro se nos cayera. Una música que olvidamos de tararear

5 

Se me vienen dos imágenes musicales a la cabeza. Un David Bowie laberíntico cantándome al oído “como el mundo se derrumba/no tiene ningún sentido de caer/cae/cae en amor/hay una especie de pálida joya dentro de tus ojos/colocaré el cielo/dentro de tus ojos/aunque somos extranjeros hasta ahora/estamos eligiendo el camino/entre las estrellas/dejaré mi amor entre las estrellas”. Y una escena de la película “Le Chat” en la que la mujer interpretada por Simone Signoret mira desde la ventana de la cocina como están tirando abajo el vecindario. En el horizonte los edificios que se levantan y más cerca los terrenos baldíos, tierras vaciadas. Algo está muriendo en sus ojos y los gatos equilibristas de los cables y un silencio después del estruendo que interroga a los dos que han permanecido juntos años y años y no saben por qué. Y ahora que el mundo alrededor se despedaza, ellos se miran y se animan a decir palabra y a callar.

5.     Otra canción “Runrún se fue pal Norte y no se cuando vendrá/Runrún siguió su viaje y llegó al Tamarugal/sentado en una piedra se puso a divagar/que sí que esto que lo otro/que nunca que además/que la vida es mentira que la muerte es verdad” Runrún es un rumor, una fragilidad, algo que parte, una paloma mensajera, una estampilla, palabras adentro de una botella adentro del mar adentro del pellejo del cielo ¿será Runrún la raíz que busca la isla?

6.      No leí a Bolaño. No conozco el desierto de Atacama. Nunca fui a ese país. Me llegan las postales, la música, algunos versos, la ceniza de no recuerdo que año en el relato de López, un yesero que habita cerca de los castillos de Pincheira, en Mendoza, cerquita de la frontera con Chile. Viajamos en la cabina de su camión que transportaba el yeso blanco picado y nos decía “un día con mis hermanos escuchamos como una explosión y después un gran silencio y empezamos a correr porque el aire era de un gris irrespirable” y luego agregó “a mi abuela se la llevaron los indios, allá en las montañas vivían y andaban todos juntos y se llevaban a las mujeres y destruían los poblados y nunca más la vimos a mi abuela”

7.       Chile me hace pensar en los volcanes, misteriosos monstruos que tiemblan y escupen el corazón de la tierra.


 Quiero escribir una historia sobre un pueblo que se volvió cenizas y una mujer en algún borde de su cocina amasando tortas fritas, narrando ese pueblo sin casas y sin gentes con las palabras apretadas en su boca sin dientes.

Una canción más que suena en la tarde en la voz de Víctor “el sol volverá volverá/la noche se irá se irá/envuélvete en mi cariño/deja la vida volar/tu boca junto a mi boca/paloma palomitay” y un puñado de semillas de hinojo y una cierta tonadita que se acelera y se detiene como un acento que llega a mis oídos y se hace agua en la boca.

Valeria Alegrucci

Decálogo de Chile

 

1- Lo primero que conocí de Chile fue a Pedro, que tenía un restorán en La Plata en los años 70 con toda su familia. Pedro era muy flaco con bigotes, medio raro, parecía que se había ido de Chile por el golpe pero después concluimos que era pinochetista. Chan!

2- Mi abuela me hacía el bife todos los días y yo lo comía, pero dejaba la grasa que era Chile.

3- 1986 En un viaje a La Rioja en medio del desierto vi la Cordillera de los Andes, ahí atrás estaba Chile, decían, había mar plantas y árboles, pero mucho no les creí

4- Diciembre 1998 Escala en Chile rumbo a Ecuador por Ecuatoriana de aviación ,. Un alivio se bajaron del vuelo 30 boy scouts insoportables.

5- Febrero 1999 En una playa semi desierta en Ecuador, almorzando con unos chilenos, compartiendo un ceviche de camarones con patacones, me cuentan que quieren la extradición de Pinochet, que estaba detenido en Londres por delitos de lesa humanidad, para que fuera juzgado en su país. Después de todo3.000 desaparecidos no es una cosa tan grave para ellos. Chan otra vez!

6- Octubre 2010 Los mineros apresados en el fondo de la Tierra, la gente como loca .La TV a full

7- 1 de Enero 2011 Bolivia. En el salar de Uyuni y los desiertos blancos miro hacia el oeste la cadena de volcanes que nos separan de Chile .Del otro lado hay más desiertos, más calor dicen. Les creo.

8- 24 de Marzo  2011 Characato, Córdoba. Leo a Bolaño por primera vez, Samay me regaló Estrella distante.

9- Abril 2011 Gonzalo me manda imágenes y sentimientos suyos en Chile por mail. Son cosas hermosas y dramáticas pero poéticas. Le creo

10- En este momento sigo leyendo a Bolaño, me encanta, después de todo parece que no somos tan diferentes los chilenos y nosotros Chim Pun!!!

Lucía Castelli

Otro decálogo al tiro

1 - Se van, hasta los que no pueden se van, o eso buscan.

2 - Quiero a Violeta ¿pero en París?

3 - Quiero a los chilenos ¿los que se van aunque no puedan o eso buscan?

4 - Miré su mar aunque apenas lo toqué. Atracción / rechazo - Atracción / rechazo -  Atracción / rechazo. Puede ser hiriente y ajeno hasta el cielo.

5 - Se puede ser más libre que nunca y sin embargo la piel se llena de barrotes.

6 - Parecen hermanos, pero no todos.

7 - Mujeres silenciosas, poderosas mujeres.

8 - Me gusta el pescado; me gusta mucho el pescado. Pero más los desniveles y los ascensores de maderas que crujen, y los mercados; incierto.

9 - Pintura color pastel de choclo.

10 - Me gusta, me abruma, me asombra, me silencia, me atrae, me repele ¿me gusta?

Florencia Bossié

Decálogo

1-      Una novela de mi adolescencia: “De amor y de sombra” una amiga se lo había regalado a mi hermana, “léela que está buenísima”_ me dijo.

2-      La dictadura en la infancia, en la adolescencia, en la vida de Neruda: Antonio Skármeta.

3-      En Chile ir a la Universidad cuesta carísimo.

4-      Ana Prada canta una canción que dice “… pero yo la que te oprime, sólo tengo soledad…” la letra es de una poesía de Gabriela Mistral.

5-      Una amiga vino un día entusiasmada a contarme de un documental que había visto sobre Violeta Parra “puso en Chile una carpa así de grande”_ me decía.

6-      Cuando me enseñaron a bailar una cueca me dijeron que imagine un río en el piso y que vaya saltando piedritas como si no quisiera mojarme los pies, lo demás es mover el pañuelo.

7-      Los 33 mineros y el show televisivo.

8-      Silvio con Pablo Milanés cantando “yo pisaré las calles nuevamente…”

9-      Pedro Lemebel, camp…

10-  Cachai?

Cristina Baroni

Un cuerpo largo, ondulante, que tiembla por debajo sin parar. Todo por debajo. Venas, sangre, hasta pienso en el útero de una mujer. De pronto la tierra necesita expandirse y tragar lo que sostiene.

Una mujer violeta que teje y desteje pero no espera a nadie

El mar que viene. El cuerpo largo extiende sus raíces hacia el agua y la hace temblar. El mar responde, viene y la tierra abre sus grietas.

Cartas de amor y textos en los transportes. Ciudades plagadas de imágenes. Bucear en las palabras todo el tiempo: urgencia por decir.

Arguedas habla de Perú (pero bien puede ser de Chile): “La cordillera es peor que el acero. Si gritas, rebota la voz.”

Una pregunta: ¿Dónde se esconde la frontera con Chile?

Una respuesta tentativa: en el revés de un prejuicio, en los hilos de Pinochet, en los intersticios que se les puede abrir a las montañas.

Treinta y tres en  boca de todos. Cuerpos que se arman y desarman por medio de la T.V. Mujeres que sí esperan.

El cuerpo largo cruza dos lenguas en una sola boca.

Un día para la mochila: hace mucho frío y estamos en un bar que mira hacia la costa. Somos tres o más, tomamos café, abrazamos las tazas para calentar las manos y no decimos nada porque miramos todo lo que se pueda los barcos que pasan. Lo próximo es el desierto.

Lucía González 

Chile tal vez sea la nación peor ubicada y estructurada de nuestro planeta; esta afirmación de Ezequiel Martínez Estrada aparenta exagerada, y sin embargo esas dimensiones (4200 x 1400 km. en promedio) son descritas por los propios chilenos como “una larga y angosta franja de tierra”. Dentro de ella, las regiones se ven como apretadas juntas que crecen entre las piedras. Los desiertos y fértiles valles, la ondulaciones de montañas sobre la costa, y la desmesurada presencia de los Andes y el Océano Pacífico, y finalmente un Sur hecho de islas y bahías, penínsulas, lagos y glaciares, en una profusión que se juzga como uno de los paisajes más bellos del mundo

Aprendí Chile en los mapas. Sobretodo de aquellos que por su tamaño, se enrollaban y guardaban parados juntos en una habitación que en mi escuela se llamaba “Salón de Mapas”.

En ciertas clases de geografía, la maestra decidía que convenía que fuesen ilustradas, y nos pedía, por ejemplo, el mapa “Físico de Argentina”(ustedes se dan cuenta de porqué razón Chile viene entonces de regalo).

A la vuelta al aula nos gustaba descubrir nuevas cosas en los mapas, que invariablemente se desenrollaban en el piso de algún corredor, para que los encargados de transportarlo analizaran la interesante razón por la que las leyendas “República Argentina” y  “Cordillera de los Andes” se leían acostadas; o bien porqué al extraño nombre de “Chiloé” le sobraba una letra.

En la temporada de los vientos ( septiembre por allá), se disputa frente a las playas, en  Valparaíso, una competencia curiosa. Los que dirigen a las cometas y las hacen volar están en tierra, en las terrazas de los edificios, y las cometas se desplazan hacia el mar. La gracia del asunto está que algunos voladores tratan de echar a los otros abajo, colocando en el hilo propio hojitas de afeitar que se desplazan hasta cortar las de los vecinos. Cuando me contaron esta variante de la actividad de remontar volantines quedé mas sorprendido aún al enterarme del modo en que lo describen: para los chilenos, el juego con las cometas se llama ”encumbrar volantines”.

La foto ha  sido vista miles de veces: en los diarios, revistas, afiches, carteles. El Presidente Allende, con el brazo derecho levantado saluda a Chile, mostrando la palma de la mano derecha abierta hacia la gente, con la vista hacia arriba, explica la vía chilena al socialismo

La imagen se publicó miles de veces en la prensa, se pegó en las calles y las oficinas, usándose algo así como una bandera indicadora de lucha.

Como tal la trataron: fue arrancada, despegada, mutilada, hasta que casi desapareció. Sin embargo, Salvador Allende reaparece y repite su mensaje, a través de alguna hoja perdida en una carpeta, de algún letrero pegado con varias hojas encima, en alguna pared semiescondida de una construcción emergente.

La imagen saluda a lo lejos: está hecha de esperanza. Es imposible modificarla, ni borrarla de la historia que continua.

En la cantata santa María de Iquique, el narrador de los Quilapayún, que muchos de ustedes han de haber escuchado advierte a los oyentes que en Chile, un país tan largo, lo que ha ocurrido puede volver a ser. El salitre de los muros de la escuela, pensamos, es muy parecido a la sangre seca que encontramos en el Estadio Nacional, y a los renglones que cuando tenía abierto el corazón, me cortaron con metal.

“mañana o pasado, o bien en un tiempo más, la historia que han escuchado, de nuevo sucederá Es Chile un país tan largo; mil cosas pueden pasar”

Ahora bien, si el mapa con el que jugamos se llama de “División Política”, tendremos una cantidad de entretenimientos diferentes. Las provincias que estén en contacto aparecerán de distinto color (¿cuál es el color que vale más?); si se han usado colores diferentes habrá sido por algún motivo, etc.

Estas preguntas no suelen tener respuesta ni en el piso del pasillo, ni en los dibujos que intentan reproducirlos en la carpeta de clase, ni tampoco ¡sorpresa! ...en la cabeza de los cartógrafos y geógrafos que se dedican a este problema. Las decisiones al respecto suelen tomarlas generales y políticos, cuyo punto de vista respecto de las preguntas también hacen ver muy otro al problema. En aquel caso de Chile habrá sido alguna como ¿cuántos países pueden incidir en el mismo lugar? ¿le quedará a Bolivia una salida al mar?  O bien ¿cuántos reclutas morirán sin haber visto algún mapa?

En  ese lugar del espacio-tiempo llamado Chile que hemos descrito han ocurrido y ocurrirán, noticias en los diarios. Muchos habitantes de estos lugares no percibirán nada de estos hechos. No estaban presentes cuando se construyó su suelo, durante los siglos y siglos en que se fabricaron los desiertos del salitre y fuerzas grandiosas enterraron en la corteza el cobre y la plata.

Otros conocen de oídas como en ocasiones se desatan sorpresivamente sobre nuestra curiosa esfera rupturas de todo tipo, emergiendo volcanes, enterrándose archipiélagos, y han estudiado alguna razones por las cuales los grupos de seres que habitan este sitio lo cambian ferozmente mediante guerras de todo tipo entre ellos. Además construyen techos para resguardarse y depósitos para atesorar lo que ansían conservar. Tal vez sepan que esto es un juego, naturalmente, que se juega con fichas. La mayoría son difíciles de ver por su tamaño. Una de ellas es llamada Chile.

Gracias a la vida que me ha dado tanto, 

me dio dos luceros que cuando los abro perfecto distingo lo negro del blanco.

Y en el ancho cielo su fondo estrellado, y en las multitudes al hombre que yo amo

Me ha dado el oído, que en todo su ancho, graba noche y día grillos y canarios;

Martillos, turbinas, ladridos, chubascos y  la voz  tan tierna de mi bienamado

Gracias a la vida que me ha dado tanto,  me ha dado el sonido y el abecedario,

Con él las palabras que pienso y declaro: madre, amigo, hermano y luz alumbrando

La ruta del alma del que estoy amando

Gracias a la vida que me ha dado tanto

Me ha dado la marcha de mis pies cansados, con ellos anduve, ciudades y charcos

Playas y desiertos, montañas y llanos, y la casa tuya, tu calle y tu patio

Me dio el corazón que agita su marco, cuando miro el fruto del cerebro humano

Cuando miro al bueno tan lejos del malo, cuando miro el fondo de tús ojos tan claros

Gracias a la vida que me ha dado tanto, me ha dado la risa y me ha dado el llanto

Así yo distingo dicha de quebranto, los dos materiales que forman mi canto

Y el canto de ustedes que es el mismo canto, y el canto de todos que es mi propio canto

El punto del decálogo que puede resumir este trabajo sobre Chile, se me ocurre que puede ser  una de las últimas canciones de Violeta. Y dentro de ella dos palabras que hablan de lo que queremos decir:

       Tempestad       Dulzura

Anselmo Badenes

Imagen de Chile.

En donde quebraran tus brazos, enorme americano

y a ti chileno que detentas palabras que ostentan luz y fantasía

cada virgen que sale desde la paz

se inmola en la esperanza de este continente

mientras pájaros oscuros

salen a patrullar la montaña

cada vagón brillante de sal

desfigura imágenes desde la mañana

temblores de ruidos perpetuos

protegen el silencio.

En este enorme sur

mis labios de hielo

reflejan amoratados cordones de nada

y tras la cordillera, guerra, muerte,

allí , en el sepulcro del fin de los días

lagos violetas y parrales sufridos de dulce y repletos de valle.

Javier Altamirano

Chile 

(de Chile no sé nada)

1-Un pedazo de carne, un bife angosto de fronteras indefinidas, entre rosado y gris, cocido en los bordes y crudo en el centro, resquebrajado y de tivio a frpio. El pedazo de carne se mueve despacio sobre el mar helado al que le llega la primera claridad de la mañana. 

2-Alguien que no vuelve.

3-Un grupo de muchachos que leen poesía en una casita en al que viven dos hermanas. Con una se acuestan, con la otra, no. 

4-La lengua vertiginosa como el granizo.

5-El desierto y un nombre completo: Atacama.

6-Una mujer que se esconde en el baño de la escuela y se queda encerrada durante semanas mientras va siendo el golpe. 

7-Canciones que desconozco.

8-Otra boca desenfrenada y magenta. Crónicas sobre sexualidad y política.

9-otro mar.

10-La réplica en miniatura de la muralla china, disuelta y carcomida por la fauna blanca de las colinas

Carolina Maranguelo

Sé mucho más de Chile de lo que creo. Parte de su cultura se acercó a mi desordenadamente así que la primer impresión que me viene es dantástica como la dupla Salas-Bam Bam Zamorano y un tanto desencantada, ya que al menos futbolísticamente, nunca fueron finalistas de nada. Chile me parece como un suspiro, como los que me despertaba una chica del secundario a la que lo único que pude robarle fueron unos discos de Víctor Jara. Para ese entoncesa Jara le faltaba un poco de rock and roll. Después entendí que Jara no tenía nada que ver con el rock. Acompañando de una novia militante oí hablar a Salvador Allende, en un documental de esos que pasan en el Pasaje Dardo Rocha.

   Tengo un amigo chileno que me despierta algunos enigmas y algunos celos. Las minas de Chuquicamata, el paso de Jama (riesgoso como pedalear en las nubes) y el océano pacífico, encantador y frío por igual, son algunas de las cosas que el mencionar Chile me trae...

Francisco Fournier

Decálogo (un índice?) de Adriana Khazki

1. La extrema delgadez

2. La filosa cima

3. La isla negra

4. El dictador

5. El canal al sur del sur

6. El temblor. El quiebre. El dolor El miedo

7. El azul gelatinoso de un pozo profundo

8. La rivalidad impuesta que quedó vieja

9. Los acantilados que sucumben ante un secreto

10. Los mariscos!

Chile.

  Tengo un Chile que no era Chile. Tengo una amiga que no está más. Entonces no tengo nada, ni mi Chile poco original, ni mi amiga que no está. No no, mala conclusión, mala conclusión. Tengo y tengo mucho, o tengo algo que ya es mucho.

  Tengo recuerdos de mi amiga ausente, tengo al chicle que se parece a mi Chile. Sí sí, esa "c" casi no estorba. Cuando dicen muy rápido "chicle", es increible, pero yo escucho "Chile". Y me quedo divagando con mi Chile poco original hasta que molestan con un "¿me escuchás?".

  El pelo rojo, rubio y castaño, los violines al sonar; hay mucho de mi amiga en este mundo ireal. Entonces me equivoqué, tengo un amiga poco original. Y sí, si está en mi mente, no la puedo tocar. Y mi Chile no es poco original, es original; está, está en el chicle y yo al chicle lo puedo saborear.

  Qué complicado es todo, ¿o yo lo hago complicado?. Bueno, pero sí es complicado que mi amiga Chilena ahora esté viviendo allá.

Carolina Heiland